Caracas.- En el trasfondo de los números puede estar la diferencia entre recibir una oportunidad para lanzar en las Grandes Ligas, o ser relegado al ostracismo. Pedro Ávila lo sabe. Leer sus estadísticas vitalicias en Las Menores, sólo otorga una visión distorsionada de lo que tiene para ofrecer a los Padres de San Diego. Una impresión vacía, sin contexto.

El derecho encara el 2024 con promedio de carreras limpias de por vida de 4.24, a lo largo de ocho temporadas en las granjas, incluida la campaña anterior, en la que dejó abultado PCL de 8.57 en 55.2 entradas en Triple A. Sin embargo, en la Gran Carpa, exhibe sólida efectividad de 3.11 en cuatro zafras. De hecho, en 2023, su EFE en la élite fue de 3.22 en 50.1 episodios.

“Creo que mi combustible, mi gasolina, es cuando llego a las Grandes Ligas”, intentó explicar Ávila al San Diego-Union Tribune, por estos días de Entrenamientos Primaverales en Peoria, sede de los californianos. “Cuando soy ascendido, me motivo a rendir al máximo. Creo que es porque sé que el equipo me necesita. Y por mucho que me necesiten, no es menos que yo a ellos”.

No obstante, también es cierto que hay otras variables a tener en cuenta, además del sólo espíritu deportivo de pertenecer al nivel más alto del beisbol. La sucursal Triple A de los frailes se encuentra en El Paso; la ciudad de Texas genera las mismas complejidades que la mayoría de localidades que conforman la Liga de la Costa del Pacífico, al ubicarse a gran altura o en el desierto.

Las características naturales de los estadios en el circuito, hacen volar las conexiones con mayor potencia y merman el movimiento de los lanzamientos al aplanarlos. Razones de peso para generar estratosférico promedio de carreras limpias de 5.69 en la conferencia el año pasado, y de 6.52 de la finca de los frailes, el peor de todos.

“Aun cuando venía con todos esos números, pudimos verlo lanzar juego tras juego en las Grandes Ligas y darnos cuenta de cómo hacía el trabajo”, aseguró Rubén Niebla, coach de pitcheo de los Padres. “Fue como decir: 'Este tipo no está nervioso'".

El 1ro de julio del 2023, el diestro fue ascendido al equipo grande, y dos días después, lanzó un relevo de tres entradas en blanco contra los Rojos, en Cincinnati. El 23 del mismo mes, fue enviado de regreso a Triple A, permitiendo nueve carreras limpias en nueve capítulos, divididos en tres presentaciones.

“Simplemente, muestra un nivel de intensidad diferente", afirmó Ben Fritz, coach de bullpen de San Diego, sobre el rendimiento del caraqueño. "Literalmente, hay un modo de competencia distinto".

Tras la partida en el receso de campaña de Michael Wacha, Seth Lugo y Nick Martínez vía agencia libre, la competencia por el cuarto y quinto lugar de la rotación está abierta en el presente Spring Training. Y el criollo tiene claro su objetivo.

“Básicamente, miré el estado de la rotación y observé ese cuarto lugar. Decidí que debe que ser mío”, visualizó Ávila. “Así opté por trabajar tan duro, si no más, que los demás para poder ocupar ese puesto”.

EL DATO

Pedro Ávila actuó en la temporada 2023-2024 de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, con Tigres de Aragua. El derecho compiló efectividad de 3.18 en 11.1 entradas divididas en tres presentaciones, tras ser adquirido en el receso de campaña desde Bravos de Margarita, en el cambio múltiple que involucró también a Thairo Estrada, Luis Rijo, Edward Olivares, Wilson Ramos y Osmer Morales.